Comportamiento Tóxico

Como seres humanos tenemos la necesidad de ser social, de tener interacciones y relaciones. Aunque estas luego no sean las mas sanas para nosotros, este tipo de relaciones no sanas se les conoce como tóxicas; el ser humano en sí no presenta toxicidad alguna, pero esta designación se concentra en las conductas manifiestas que generen un impacto negativo directamente a los demás dando como resultado una influencia nociva y estorbando para nuestro desarrollo.

El comportamiento tóxico se extiende en cualquier escenario de nuestra sociedad, también dentro de nosotros mismos, todos somos personas tóxicas no siempre, no todo el tiempo, ni con todas las personas, pero si algunas ves en tu vida, al aprender a detectar los comportamientos tóxicos primero en ti, para que después puedas detectarlos en los demás y así decidir los limites y las acciones que debes tomar.

• Ego; Hablar continuamente de ti mismo, tratar de ser el centro de atención; ya que se genera como un agujero negro donde este insiste ser alimentado, atendido, siempre que se tenga en cuenta e incluso hasta venerado. El justificar tu comportamiento para manipular y acomodar las cosas a tu beneficio.
• Sacar lo negativo a todo lo nuevo, lo que se proponga ya que se es experto en encontrar problemas en cada solución propuesta.
• Ser la victima para poder ser el centro de atención y así justificar sus decisiones y comportamiento, esta estrategia permite disponer los recursos disponibles en el momento que se quiera.
• Desear lo que no se tiene y odiar a quien lo tiene es una fuente de sufrimiento y el motivante de muchas conductas agresivas.
• No hay inteligencia emocional, ya que no hay responsabilidad sobre los actos ni sus consecuencias. La frustración es algo muy común por lo que no se sabe canalizar la ira.
• No hay alegría por el éxito de los demás.
• La pereza de hacer funcionar las cosas o de que la oportunidad de tu vida va a llegar sola.
• Cuando no hay congruencia, las acciones no están a la altura de las palabras.
• Chantaje emocional.

La clave está en detectar que hay una toxicidad emocional que está relacionada con las creencias que tenemos sobre nosotros y nuestro entorno, por lo que es importante detectar estas conductas primero en nosotros mismos para trabajarlas y así poner distancia en las personas que no quieras en tu vida.